100 días después del parón por causa del coronavirus, se dio el salto inicial a la Fase Final de la Liga Endesa. El primer partido que se ha disputado en esta vuelta a las canchas nos ha traído un derbi catalán entre el líder, el Barcelona, y el duodécimo clasificado, el Club Joventut de Badalona. A priori, el Barça era el claro favorito para llevarse la victoria en La Fonteta y así se presentó en el partido, consiguiendo un parcial inicial en los 5 primeros minutos de juego de 16-2. A esto se le unió la baja de Klemen Prepelic, el jugador cedido por el Real Madrid, el acierto del Barcelona en el tiro (5/5 en los primeros minutos de juego), el desacierto del club verdinegro y que además, el Joventut ha tenido que contar con 7 canteranos para esta vuelta a la competición.
A pesar de todo esto y de lo mal que pintaba desde el inicio, el primer cuarto terminó con un marcador de 21-17 a favor del conjunto de Pesic. La reacción de Carles Durán, entrador del Joventut, fue ejemplar. Les dijo a sus chicos que perdieran el miedo a jugar, que el Barça estaba siendo superior pero no por ello había que temerlos, por muy superiores que fueran físicamente. Esta charla en el entretiempo parecía surgir efecto ya que conseguían empatar a 21 en lo primeros minutos del segundo cuarto. Sin embargo, Pesic tenía un as bajo la manga. Al acierto de Victor Claver, quiso unir al mago Adam Hanga. Esto hizo que el Barcelona volviera a despegarse en el marcador y que el segundo cuarto terminase con un parcial de 23-13 a su favor, lo que suponía que se llegase al descanso con un más 14 para el líder de la Liga Endesa (44-30 en el marcador).
Tras el descanso, llegó el turno para la reacción del Joventut. Los jóvenes empezaron a anotar y a crear juego. Además, consiguieron ir frenando a los Claver, Hanga, Oriola y compañía y esto les permitió acercarse en el marcador. Las buenas defensas venían por parte de Oliver Stevic, y en ataque la creatividad y el acierto en el triple de Xabier López-Arostegui y Artus Zagars, se unieron al desparpajo y descaro de los jóvenes Josep Busquets y Arnau Parrado. En el tercer cuarto, parecía decantarse el partido a favor del Barça con un más 17 al final de este periodo y aún habría tiempo para que la diferencia aumentase en el marcador al principio del último cuarto hasta los 22 puntos.
Pero no estaba todo dicho, y gracias al empuje de Oliver Stevic y Conor Morgan, el Club Joventut de Badalona se lo empezó a creer y consiguió reducir la diferencia hasta los 5 puntos a falta de un minuto para el final. Tanta era la confianza que tenía el conjunto badalonés, que consiguieron ponerse a solo 2 puntos de distancia a falta de 25 segundos para el final del encuentro y llegaron a creer en la victoria. Sin embargo, la estrategia de las faltas no le salió bien puesto que, se las hicieron a Nikola Mirotic y el jugador español de origen montenegrino, es uno de los mayores especialistas desde de la línea de tiros libres de nuestra liga. Al final, el encuentro terminó con un 96-92 en el marcador y con la constancia de que quien quiera pasar a semifinales va a tener que trabajar duro para conseguirlo.
