Ya conocemos todos la mala relación entre la directiva y la afición del Valencia, pero es que esto está siendo a otro nivel. Tras la mala campaña del equipo, los dirigentes chés han decidido declarar transferibles a varios miembros de la primera plantilla, y ya le habrían comunicado al nuevo técnico Javi Gracia que no cuente con ninguno de estos dos jugadores.
Según informa el diario AS, el Valencia ya habría aceptado una oferta del Villarreal de 13 millones de euros aproximadamente. Parece mentira, pero todos ellos serían para pagar el traspaso de Coquelin, de forma que el capitán valencianista llegaría totalmente gratis al estadio de la Cerámica.
El traspaso de Coquelin ya está cerrado, firmará por cuatro años de contrato. Sólo faltaría terminar de acordar el salario de Parejo que firmará por tres temporadas, hecho que se rubricará esta jornada de lunes. La ficha de ambos será de una cifra parecida a la que ya cobran en el Valencia, unos 5-6 millones de euros entre los dos. El Villarreal ya habría convencido a los jugadores para que dejaran el Valencia hace ya 2 semanas.
El Valencia quiere desprenderse de los dos jugadores antes de la primera sesión de entrenamiento con Javi Gracia, este mismo miércoles. Podría anunciarse el fichaje de los dos jugadores en escasas horas para que estén a las órdenes de Emery lo antes posible.
Antes de todo esto, el Villarreal quería cerrar el traspaso de Zambo Anguissa, pero el ascenso del Fulham ha hecho que se complique la operación. De todas formas, el fichaje del camerunés habría costado casi el doble de precio que por traspaso de Parejo y Coquelin, y cobraría lo mismo que la suma de estos dos.
Un movimiento buenísimo por parte de la directiva de los groguets y a la vez, sería uno de los traspasos más escandalosos de los últimos años en el Valencia y en el fútbol español. El valencianismo está totalmente indignado con los máximos dirigentes del cuadro ché y ha perdido la ilusión por el equipo. No se sabe hasta cuándo puede durar esta catástrofe deportiva, pero puede llegar a dejar serias dudas sobre cómo le va a ir al club en el futuro.
