Un Barcelona enchufado en la primera media hora y desaparecido durante el resto del partido, consigue la victoria frente a un Dinamo de Kiev que le ha puesto en las cuerdas durante gran parte del encuentro. Los de Koeman consiguen los tres puntos en un partido sin brillo y que deja muchas dudas en los culés. Quizá tuviera razón M. Lucescu cuando afirmaba antes del partido que no veía como principal aspirante al Barcelona para llevarse la competición europea y es que lo único positivo que se puede sacar del partido es la victoria de los tres puntos, para colocarse líder del grupo, y la recuperación de Ter Stegen que ha salvado a un mal Barcelona.
En los onces iniciales la sorpresa se observaba en el eje de la defensa con la ausencia de Lenglet por F. de Jong. En el equipo ucraniano un once repleto de jóvenes han salido de inicio tras las ausencias de varios futbolistas por Covid-19. El Barcelona salió con ganas de ganar, creando juego por las bandas y por el eje central y encontrando espacios para las llegadas de los de arriba. A los 5 minutos del partido una gran internada de Ansu Fati deja un balón a Leo Messi en el borde del área para que este intente deshacerse de los defensores. En el intento de bloquear al argentino, Denys Popov comete penalti a favor del FC Barcelona, convirtiéndose así en el primer gol para los locales. Con este gol Messi se convierte en el jugador con más goles en la Fase de Grupos (71). Los minutos posteriores al gol el Barcelona tuvo otras dos ocasiones claras de Pedri y Griezmann que podía hacer pensar en una gran goleada por parte de los culés. Finalmente, no fue así y el Dinamo de Kiev se reactivo y empezó a tener una posesión importante creando movilidad de balón y empezando a llegar a la portería de Ter Stegen que antes de finalizar la primera parte tendría que intervenir en varias ocasiones claras de los ucranianos.
En la segunda parte no cabio para nada el panorama, los jugadores del Barcelona no conseguían realizar un juego rápido con balón ni una buena presión defensivamente. Esto provocó el enfado de Koeman que se vio en la necesidad de realizar cambios para frenar el furóz ataque del Dinamo de Kiev. Los cambios eran claros refrescar la banda derecha, zona del campo que estaba complicando más al Barcelona en defensa, cambio a Griezmann por Dembélé y a Pjanic por Sergi Roberto. A medida que pasaban los minutos los de Lucescu llegaban con mayor facilidad al área rival donde se encontraban con las grande paradas del guardameta alemán que hasta en seis ocasiones de gol tuvo que intervenir. Tras un córner no finalizado en primera jugada, el Barcelona consigue poner un balón a Ansu Fati por banda izquierda para que centre el balón con gran facilidad a G. Piqué que no falla de cabeza.
Con 2-0 el Barcelona se veía en un plácido final de partido pero le duraría poco la alegría ya que tras una buena contra de los ucranianos fianalizaba con un pimer disparo que consigue blocar el alemán pero que deja el rechace en boca de gol para que TSygankov ponga el 2-1. El partido finalizaría con el Barcelona pidiendo la hora en un partido muy malo para los de Koeman.
Tras finalizar el partido el segundo capitán del equipo azulgrana, Gerad Piqué, afirmaba en las declaraciones para Movistar TV el mal partido del Barcelona en la noche de hoy y la falta de presión por parte del equipo. Asumía también las palabras de M. Lucescu con relación a no ser favoritos en Champions, “Es normal que no nos vean como favoritos tras esos años, hay que trabajar y con el tiempo los resultados llegarán, veremos si llegan este año”.
Koeman después del partido ha detallado la falta de juego y ocasiones y sobre todo el mal juego en la parte defensiva, “empezamos bien el encuentro pero perdimos el control, han creado mucho peligro y gracias a Ter Stegen hemos podido conseguir la victoria”
