Tras un día largo en el que socios, jugadores y personalidades del club blaugrana han ejercido su derecho a voto, Laporta ha ganado las elecciones a la presidencia del Barcelona, convirtiéndose esta en su segunda etapa en el cargo, siendo la primera entre 2003 y 2010 y en la que logró grandes éxitos a nivel deportivo como a nivel de gestión. El expresidente blaugrana ha arrasado en las votaciones, con un 57% de los votos, muy por encima del 31% obtenido por Font y del 10% por Freixa.
Laporta regresa al club y lo hace con una responsabilidad máxima, ya que deberá afrontar la crisis económica por la que atraviesa el club y plantear un proyecto deportivo ambicioso de cara al próximo año que sirva para que el Barça vuelva a estar en la pomada en los torneos más prestigiosos del planeta. Ese proyecto deberá convencer al líder blaugrana: Leo Messi. El rosarino entabló muy buena relación con Laporta en el pasado, y el ya presidente azulgrana tiene en su mano la continuidad del argentino en los próximos años.
Otro de los retos a los que se deberá enfrentar Laporta tienen mucha relación con La Masía. La llegada de Koeman al banquillo ha servido para que futbolistas desarrollados en categorías inferiores del club, despunten y tengan oportunidades en el primer equipo, Riqui Puig e Ilaix Moriba entre otros. La apuesta de jóvenes promesas en los últimos partidos ha introducido al equipo en una dinámica muy positiva donde están habiendo muchos brotes verdes, y la continuidad por esa apuesta dependerá en gran medida de las decisiones que tome Laporta al frente del cargo.
El Barça tiene cabeza visible, y Laporta y los suyos intentarán devolver la ilusión a los aficionados y al club a lo más alto…
