Se veían las caras Granada y Molde en Octavos de Final de Europa League, partido de ida. Si bien el equipo de Diego Martínez partía como favorito, apenas llevaba a once jugadores del primer equipo. El Molde planteó un buen partido, pero Molina y Soldado marcaron la diferencia.

El encuentro empezaba con un asedio nazarí, con un Kenedy muy activo. El Molde empezó muy flojo, pero fue a más e incluso tuvo acercamientos por la banda derecha, donde la velocidad de los jugadores noruegos eran en ocasiones demasiada para Víctor Díaz. Linde tenía buenas intervenciones, pero finalmente el gol nazarí llegó.
En el 26, un saque de portería de Rui Silva llegaba a Jorge Molina, que tras un fallo defensivo, hizo el 1-0 a placer. Tras ese gol, el Granada dio un pasito atrás y empezó a jugar con mas calma, aunque el Molde quería aprovechar las pocas ocasiones que tenían. Llegábamos al descanso con un equipo local más que satisfecho.

El segundo tiempo empezaba algo raro para el Granada. El Molde no se sentía incómodo, y se acercaba a tres cuartos, aunque no generaba mayor peligro. La defensa del club rojiblanco se mostró sólida y sin fisuras, con un Duarte muy seguro. Con el paso de los minutos, el partido se rompía y llegaban más ocasiones al contra ataque, pues el Molde empezó a adelantar líneas.
En el minuto 75, llegó la calma. Soldado enganchó una volea majestuosa en el área para batir al guardameta del Molde. En los 15 minutos restantes, el equipo local se lo tomó con muchísima más calma, pues el resultado y el cronómetro corrían a su favor. También ayudó la expulsión de Ellingsen en el 71.

Con este resultado, el Granada encarrila una eliminatoria de 180 minutos, pues queda el partido del próxima jueves 18 a las 18:55 en Budapest.